Twitter mostró una vez más su creciente poder mediático con una serie de anuncios tan interesantes como polémicos durante Chirp (piar en inglés), su primer evento para desarrolladores utilizando su API. Pero más que de código, se habló finalmente mucho de negocios.
Entre el lanzamiento de los Promoted tweets (su primer intento de monetización a través de un sistema directo de publicidad), de nuevos acuerdos con Google (incluyendo el inútil Follow Finder y la búsqueda en tiempo real en el pasado), el lanzamiento de sur propio url shortener, la compra de tweetie (un cliente para mac e iPhone), el anuncio del próximo lanzamiento de una versión para Androïd, el desarrollo oficial de la geolocalización (¿Foursquare en peligro?) y la revelación de la cifra de 105.000.000 de usuarios registrados (sin comunicar sobre la cifra de spam que podría alcanzar el 30%) para calmar los escépticos, me parece que tenemos ahora suficientes razones para preguntarnos si los chicos de Twitter van a seguir piando mucho tiempo.
Hay por supuesto una posible doble interpretación en mi uso del término "piar".
Primero, podríamos considerar que Twitter quiere muy sencillamente emanciparse y dejar de lado su imagen de parajito azul o de ballena simpática. Controlando los desarrolladores (¿Apple-like?), desarrollando sus propios clientes en cada plataforma (¿Google-like?) y teniendo su propio sistema de publicidad (¿Facebook-like?), Twitter está construyendo un ecosistema proprietario potencialmente muy poderoso. Las estrategias web de Yahoo! o de Microsoft siendo un poco borrosas, Twitter quiere tal vez volverse más que un buzz y comer una buena parte del pastel.
Podemos también pensar que Twitter, o más bien sus creadores e inversionistas están construyendo la mayor catapulta especulativa de estos últimos años digitales. Entorno proprietario, publicidad, masividad, los ingredientes perfectos para atraer los gordos. Microsoft, que no pudo comprar Yahoo!, podría estar interesado en invertir unas centenas de millones de USD. Google cuyos Buzz y Wave nos han mostrado los limites del monstruo (¿cúal fue el último lanzamiento de Google que les dejó sin voz?) y porqué no Apple (cuya estrategia de servicios web sigue siendo poca clara) tienen más que suficiente cash en la caja para comer el parajito.
Algo cierto es que Twitter, 3 años después de su lanzamiento, acaba de pasar una etapa muy importante en su vida y podría sorprendernos aún más, en la piel de un monstruo o la de un futuro novio. De todas formas todo indica que la ballena desea volverse tiburón.